SOBRE LA EXCEPCION QUE NUNCA CONFIRMA LA REGLA:
  1. Hay una larga serie de estupideces que se dicen a diario y alteran mis maltrechos nervios.

  2. Una es escuchar a cada rato el nefasto "hoy por hoy", que parece dispararse inconteniblemente de la boca de la gente cuando la TV les pone un micrófono a su alcance [y peor los conductores y periodistas], cuando con decir "hoy" alcanza perfectamente, siendo innecesario comenzar cada frase diciendo "hoy por hoy" [si vale decir "hoy por la mañana", "hoy por la tarde", y "hoy por la noche"].

  3. Otro es el "había habido" usando a un verbo auxiliar para auto-auxiliarse [en vez de decir "hubo"].

  4. El ligeramente imbécil "no, nada".

  5. El "dequeísmo", donde el ejemplo más famoso es el "yo pienso de que..." cuando lo correcto es decir "yo pienso que..." [incluso no es muy elegante incluir un "yo pienso" o "yo digo" en una respuesta, pues se da por hecho].

  6. Obviamente me irrita cuando me dicen "te voy a decir una cosa".

  7. La muerte definitiva del "lo que" reemplazado por el "lo cual": lo que corresponde decir es "el cual" o "la cual" para referirse a personas, y "lo que" para referirse a cosas.

  8. La palabra "problemática", usada en lugar de "problema".

  9. "Entrar adentro", "salir afuera", "subir arriba", y "bajar abajo".

  10. El "riesgo de vida", que los periodistas usan constantemente para referirse a un "riesgo de muerte".
  11. El "traiganmen", en vez de "traiganme".

  12. El "traiganmelón", en vez de "traiganmelo".

  13. La "ejecución" de los penales, porque todos los relatores dicen que los penales se ejecutan, y nunca que se patean o tiran, como cualquier otro "tiro libre".

  14. La "Gran Videla": A este dictador le gustaba decir "la Nación toda", en vez de "toda la Nación", y lo han copiado cientos de periodistas, y flojones escritores de discursos, nabos todos, que cuando usan este molde invertidor... "no saben cuánto las bolas me hinchan".

  15. Y, obviamente, otro disparate que no puedo dejar afuera de mi lista negra, es la afirmación casi siempre pedante sobre "excepciones que confirman reglas" que, o no son excepciones, o por el contrario voltean a las reglas.

  16. Una excepción es una falla para cualquier regla y, a la larga, una suma importante de excepciones terminan propiciando un cambio de dogma o, dicho más sofisticadamente, un cambio de paradigma.

  17. Cuando una excepción confirma una regla, en realidad es porque fracasa como excepción.

  18. ¿ Y qué hay de la economía con sus enemistados modelos ortodoxos y heterodoxos ?

  19. Pues bien, la ortodoxia liberal, la de derecha, la de los fundamentalistas de mercado, es la que sigue más fielmente las reglas, pero no es la que dicta las reglas, ni tampoco parece estar muy convencida pues a diario intenta hacerle trampas a las leyes de mercado, cuando todas esas trampas o alquimias económicas están contempladas por las reglas con sus consecuencias muy bien determinadas.

  20. La economía Argentina no es ninguna excepción, y lo que no está en regla con la ortodoxia liberal, a la larga falla, y hay que pagar las consecuencias.

  21. Pero, eso está contemplado por los hábiles políticos argentinos que, cuando sus modelos económicos fracasan, simplemente culpan a otros políticos, países, organismos internacionales, fondos buitres, especuladores locales, ahorristas, maestras jardineras, y bla, bla, blá.

  22. Una de las leyes de mercado dice [más o menos], que el capital va a donde se lo trata bien y se fuga de donde se lo trata mal, y ¿ hace falta decir que Argentina [pese a que está creciendo] no es la excepción ?

  23. Otra de esas leyes dice que crecer es más fácil [o sea que cuesta menos] con más libertad y más capitales. Las excepciones a esta regla del crecimiento han sido los países comunistas que de economías agrícolas atrasadas pasaron a industrializarse aceleradamente, pero, el precio de ese cambio lo pagaron dos generaciones completas de habitantes práticamente esclavizados por los partidos comunistas dueños del poder, de las fortunas, y hasta de las vidas de sus poblaciones. O sea que no les costó menos, sino mucho más, y que fue pagado por millones de personas con frustración, sometimiento, miedo, y miles de horas haciendo colas para comprar pan, papas, fideos, o lo que sea, porque todo estaba racionado.

  24. En Argentina estamos mucho mejor que esos países, porque tenemos más libertad, pero evidentemente estamos por debajo del nivel de vida de Europa occidental y USA, porque ellos tienen más libertades. Entonces, la regla ortodoxa liberal se cumple incluso en la heterodoxa Argentina kirchnerista.

  25. Que un modelo heterodoxo cualquiera funcione durante décadas no se discute [sin importar cuántos votos obtenga el líder político que lo propicia] pues un modelo peor como el comunista también ha funcionado, la cuestión es a qué precio, quién va a pagar ese precio, y por cuántos años -padres, hijos, y nietos- van a tener que pagar para no recibir nada a cambio apenas para mantenerse dentro de la capa más baja de la clase media, sin poder despegar nunca [antes con esfuerzo obteniendo un título universitario se podía ascender socialmente, hoy hasta ese sueño nos han quitado].

  26. La solución no estuvo nunca en la izquierda, ni en el centro -que es una izquierda pero lenta-, la solución tampoco está dentro del selecto grupo de capitalistas millonarios que por un 0,2% de ganancias adicionales venden a su madre, pactan con el diablo, y nos contaminan medio planeta.

  27. La solución teórica hace rato que está guardada en los libros de los liberales austríacos, y está guardada porque es casi imposible llevarla a la práctica. Lo que necesitamos para cumplir ese programa es una camada de dirigentes insobornables, decentes, capacitados, sensibles, y hasta [pese a que no voy a la iglesia] ¡ cristianos con verdadero amor al prójimo, personas que sean felices ayudando, y no complotando, y menos atornillándose al poder aunque en determinado momento puedan ser los mejores, igual tienen que cumplir su etapa e irse !

  28. Democracia implica alternancia de gobernantes en el poder, sin excepciones.